Skip to content Skip to footer

A TODOS LOS MAESTROS DE MIS RELACIONES

Relaciones responsables.

Nuestras relaciones son las mejores plataformas de despegue para nuestra evolución. En lugar de verlas como problemas tenemos la oportunidad de hacernos responsables de nuestras propias decisiones y agradecer toda las oportunidades que nuestras relaciones nos han dado para darnos cuenta donde podíamos ser mejores, dónde podíamos amarnos mejor y cómo podíamos amar mejor a los demás.

He estado pensando últimamente en todas mis relaciones de pareja pasadas. Quería mirarlas hoy desde un punto de vista distinto: desde mi responsabilidad. Y desde la responsabilidad debo aceptar que yo tomé siempre la decisión de ser partícipe de todas ellas, independientemente de cómo fueran yo siempre dí mi consentimiento. Yo las elegí y ellas me eligieron. Hasta que una de las partes o las dos elegimos distinto.

Si las miro desde ese punto de vista necesito prometerme primero mi misma que no me voy a castigar por nada. He estado aprendiendo, antes no sabía hacer las cosas mejor, no es que no quisiera es que no sabía. Tenía que aprender cómo hacerlo. Y eso fue precisamente lo que aprendí en cada una de estas relaciones con bocados dulces y a veces amargos.

Hoy estoy lista para aceptar todas las fases de mi proceso evolutivo. Hoy me felicito por todo lo que he llegado a aprender de la vida. El mayor mérito de ese aprendizaje es cuando he sido capaz de aprender de lo que me hizo daño, a veces tanto y saberlo perdonar.

Y la magia de la vida es esa: extraer del dolor el aprendizaje, luego que aprendiste de él ese dolor se disipa, ya cumplió su propósito y se va. En su lugar queda una especie de satisfacción y serenidad: eso era, lo comprendí. 

Ahora soy mejor, eso ya no puede volver a pasarme. He crecido, lo he logrado, un paso más. Y esa es la felicidad simple de la vida, esa comprensión que es como un paso más hacia adelante. Un paso más que nos acerca a ver realizada nuestra mejor versión.

Tengo que decir que hoy me toca celebrar mis relaciones, las que tras el aparente veneno me traían escondido un regalo, el elixir de mi actual felicidad. 

Por eso hoy AGRADEZCO A MIS RELACIONES PASADAS. Y esto va para todas y cada una de ellas:

Gracias por no ser lo que pretendí que fueras, pues me hizo ver la importancia de ser real desde el interior.

Gracias por tus mentiras, pues me mostraste como solía mentirme a mí misma para salir de la realidad y no ver las cosas como realmente son.

Gracias por ser infiel, pues me hiciste ver cuántas veces dejé de creer en mí e ignorar mi propia verdad intuitiva.

Gracias por tu falta de compromiso, pues desde el inicio me hizo ver la importancia de comprometerme conmigo misma, con mis sueños, mis emociones y no ser complaciente y permisiva por encima de mi.

Gracias por las falta de respeto, haciéndome ver cuántas veces fui irrespetuosa con mis propias emociones en pos de complacer primero las tuyas o las de los demás. 

Gracias por las incoherencias, porque reafirmastéis en mi la importancia de que los hechos valen más que las palabras.

Gracias por las faltas de amor, porque me di cuenta que nadie puede amar si no se ama primero y que nadie va a amarme tanto como yo si me conecto con mi verdadero ser interior.

Gracias por todas vuestras acciones insanas, porque me hicieron ver lo importante que es tomar las riendas de mi vida para trabajar en mi interior y aceptarme plenamente, reconocerme, valorarme , respetarme, amarme y sanarme desde dentro.

Gracias por salir de mi vida siguiendo vuestro propio proceso de evolución y hacerme consciente de que uno elige qué camino andar y no debemos ni podemos cambiar a nadie. Aprendí a respetar el camino que cada uno elije a pesar de lo doloroso que eso pueda ser. Aprendí a tomar mis propias decisiones sin evitar hacerlo por no dañar a nadie. 

Gracias a todos por ser mis maestros!

Gracias por cerrar hoy un ciclo de mi aprendizaje y permitirme reconocer todo aquello que quiero transformar en mi y todo lo nuevo a lo que quiero dar la bienvenida a mi vida. Gracias por dejarme ir y gracias por dejar que me marchara.

Gracias por haber permitido así que hubiera espacio para lo nuevo que estaba por venir.

Gracias por haber sido parte de mi camino hacia la felicidad. Me libero de mi pasado y os libero de él con amor.

Ahora todo está en mis manos.

SIEMPRE GRACIAS. OS DESEO SIEMPRE , DE TODO: LO MEJOR!